miércoles, 17 de abril de 2019

Martín Armada: “Trabajo como editor y editar mis propios textos me enfrenta a todos mis vicios y manías”




El escritor Martín Almada habló con Entre Vidas acerca de su libro de poesía La gran meseta publicado por Caleta Olivia Ediciones y contó que estuvo dos años corrigiendo el libro hasta que sintió que no había que ajustar nada más.






¿Qué rituales tenés al momento previo a escribir?
Ninguno en particular, o ninguno al menos que pueda reconocer como tal. Trabajo de manera bastante irregular, bastante más de lo que me gustaría.

¿Con qué frecuencia escribís?
Escribo todos los días por trabajo. Respecto a la poesía, hay veces que lo hago más regularmente que otras. Pensar en palabras, eso sí es diario.

¿Quién te inculcó tu amor por la poesía?
El lenguaje poético está en muchas cosas, tiene que ver más que nada con una pulsión de registro y una práctica con la lengua. En mi familia hay grandes contadores de historias y siempre hubo una biblioteca, irregular, despareja y variada. Creo que la poesía en algún punto tiene que ver con darse el permiso de atravesar todos los registros sin miedo a equivocarse, algo que descubrí después de mucho tiempo. Lo mejor que me pasó a mi fue aceptar que un poema puede llegar a donde uno quiere o no, pero no hay posibilidad de error en el ejercicio libre de la imaginación. Es una posibilidad de juego. Y cuando comprendés el poder infinito de esa licencia, te enamorás.

¿Por qué decidiste que tu libro de poesía se llamara La gran meseta?
Tiene un poco que ver con que el libro es, de alguna manera, un recorrido en el que los elementos que se atraviesan son casi siempre los mismos. Lo que va variando es la forma de pasar a través de ellos o la forma en la que esos elementos transforman la mirada. A cada transformación, por mínima que sea, se la puede volver poema. Lo que el ejercicio de la poesía activa en el lenguaje es una especie de alarma que para mí señala que la monotonía es una forma tramposa de armonía. En el caso del libro, cada poema fue un intento de acompañar con palabras una mutación que, pese a ser mínima, al menos para mí fue reveladora.

¿Cómo fue el proceso de selección de los poemas que aparecen en el libro?
Arduo, obsesivo. Trabajo como editor y editar mis propios textos me enfrenta a todos mis vicios y manías. En principio, dejé lo mínimo indispensable. Mi intención no tenía que ver con la abundancia.

¿Cuál es tu poema preferido del libro y cuál es el que destacan los lectores?
Tengo un vínculo particular con todos, es una relación secreta me parece, no la termino de entender. En todos dejé que pasara  todo lo que podía pasar. Cada poema costó algo, me demandó algo y por eso no hay ninguno que sea mi preferido. Respecto a los lectores, no lo sé. Lucas Finocchi, un amigo músico, hizo con dos de ellos unas canciones que me gustan mucho: eligió el último poema del libro y uno en el que aparecen cables arrancados. Con música los quise un poco más.

¿De qué temas se nutre tu escritura?
El pasado, el presente, el futuro, la naturaleza, el amor y mi casa. Cosas muy generales y variaciones sobre esas cosas.

¿Qué temas de los que todavía no escribiste te gustaría hacerlo en un futuro?
Me gustaría seguir buscando y recién ahí ver qué pasa. Es posible que siempre escriba de lo mismo. O no. La idea de no conformarme ya me hace sentir satisfecho, cuando la inconformidad no provoca angustia genera una inquietud muy vital.

¿Qué libros o autores recomendarías leer?
Todo lo que no tenga que ver con tu mundo como lector me parece un buen plan. En apariencia nuestra vida es bastante sedentaria, por eso cuando leo me gusta que siempre haya una sensación de riesgo y aventura. Cuando leo me quiero ir a otro lugar, ni mejor ni peor, diferente al que puedo imaginar.

¿Cómo te llegó la posibilidad de publicar el libro con Caleta Olivia Ediciones?
Me convocó Gabo Moreno, fue muy paciente. Esperó dos años hasta sentí que ya no podía hacer nada más por ajustar el libro.

¿En qué nuevo proyecto estás trabajando actualmente?
Estoy muy dispuesto a aprender más de lo que la poesía me permite conocer como lector y a la hora de escribir. A que mirar con un poco más de libertad. Quiero saber un poco más de mí y aprender a estar a gusto con eso. Es una verdadera ambición.



martes, 2 de abril de 2019

Florencia Soler: “El amor y la música son mis temáticas predilectas”





La escritora Florencia Soler habló con Entre Vidas acerca de su primer libro de poesía NG, un diario de delirios que saldrá este año a través de Halley Ediciones y contó que la gente que lo lea se va a encontrar con poemas de una historia intensa de amor que no fue.




¿Qué rituales tenés al momento previo a escribir?
No hay demasiado ritual porque no siempre es premeditado el momento de la escritura. Sí hay situaciones más propensas para ello. Un momento de soledad y música por ejemplo. La música es mi lugar favorito para escribir, me lleva a lugares muy profundos dentro de mí, mi esencia real y la curiosidad de explorar y explotar esos sitios. En esa sensación de libertad plena, de sentir que nada es imposible, allí surge la creación.

¿Con qué frecuencia escribís?
Me identificaría más con una pregunta inversa, con qué frecuencia no escribo jaja. Hay semanas que escribo más que otras pero siempre estoy en algo, ya sea en mi cabeza, en el papel o en la búsqueda. Es un placer para mí hacerlo y una necesidad.

¿Quién te inculcó tu amor por la poesía?
No fue alguien en particular, creo que fue todo un contexto, varios factores que tuvieron algo que ver en esto. De chica escribía cuentos de hobbie y en la escuela tenía cierta tendencia y facilidad para la escritura, para la redacción de diferentes tipos de textos pero la vida me fue llevando hacia otros lugares muy diferentes. Sin embargo, cuando hay algo que pulsa adentro de uno, lo podemos dilatar en el tiempo pero tarde o temprano emerge y sale a la luz. Éste libro es un trabajo de 3 años de poesía. Pero también es el resultado de toda una vida, de cosas tapadas, guardadas que encontraron una hendija, una excusa para poder  brotar. Tampoco es que yo busqué a la poesía, creo que para ser más precisa debo decir que ella me buscó a mí. Mi afinidad para con la escritura, entrelazada a mi personalidad sensible, romántica y soñadora daban por resultado un buen proyecto de poeta.

¿Por qué decidiste que tu libro de poesía se llamara NG, un diario de delirios?
El nombre del libro surgió hace unos años, prácticamente en el mismo instante en que nació el deseo, la idea de escribir un libro y publicarlo. Por eso hubiera sido imposible otro título, porque el libro no existía pero ya había sido concebido con ese nombre. NG son las iniciales de mi musa inspiradora, quién además fue una gran influencia en mi poesía, alguien que yo admiro mucho y que provocó en mí desde la creación de poemas hasta las más poderosas fantasías románticas. Por eso me identifico y elegí la palabra 'delirios', en referencia a algo platónico. Eso es lo que tiene de maravilloso el arte, es el lugar donde hay un deseo que se impone ante uno mismo, un deseo de algo que si no existe, igualmente allí podemos inventarlo.

¿Cómo fue el proceso de selección de los poemas que aparecen en el libro?
Yo hice una pre-selección, eso no fue tan grave porque a esta altura de mi poesía, puedo admitir mi evolución y descartar lo que ya no va conmigo. Pero la selección con mi editora Mariana Kruk, sí fue un poco más fuerte. La cuestión de afinar la autocrítica y buscar la objetividad para lograr un buen trabajo es difícil sobre todo cuando hay textos que son personas, emociones, lugares, recuerdos. Entonces se vuelve un desafío despegarse de los sentimientos que están tan entrelazados al menos con este género poético. Cada poema tiene una historia detrás, un contexto al que me ví muy encariñada y por eso la dificultad a la hora de definir. Pero trabajar esto con Mariana, con su calidez, su paciencia y su amor es lo más cercano a la tranquilidad y satisfacción asegurada en los resultados. Además está hablada la posiblidad de un volumen 2, así que nada se pierde. Hay poemas que no entraron en este libro pero quedan pendientes para ver la luz más adelante.

¿Cuál es tu poema preferido del libro?
No sé si tengo uno favorito, es como te decía recién. Los poemas también son contextos, momentos determinados, recuerdos. Entonces hay algunos que se han llevado más de mí que otros y eso me hace valorarlos un poco más. Poder plasmarme trasparente en un texto es un gran triunfo para mí así que eso también pesa. Hay un texto que se llama 'Deseos estrellados' y lo amo mucho porque tiene que ver con eso.

¿De qué temas se nutre tu escritura? 
Todo aquello que me hace sentir viva, todo aquello que me saca del estrés de la rutina, todo aquello que me hace mirar hacia dentro de mí funciona como motor para existir y en mi caso, por ende, para escribir. El amor y la música son mis temáticas predilectas.

¿Qué libros de poesía o autores recomendarías? 
Una de mis grandes referentes es Alejandra Pizarnik, una adelantada hermosa en la poesía de su época. En cuanto a la poesía en la actualidad, afortunadamente con las redes sociales se facilitan y se expanden las fronteras en el descubrimiento literario o de las artes en general. Poetas españolas como Marina Rosado Andrades y Sara Bueno me resultan fascinantes y muy recomendables. Y después tengo grandes influencias en la música sobretodo, grandes compositores que considero poetas extraordinarios como Gustavo Cerati, quien influyó en mí desde muy chica con sus letras maravillosas. Bandas clásicas de la historia del rock and roll como The Beatles, Pink Floyd, Led Zeppelin cuyas letras han trascendido a lo largo de los años, y que siempre seguirán vigentes. Hay más poesía en el rock and roll que en la vida misma muchas veces y eso me apasiona muchísimo.

¿Qué objetivos tenés dentro del ambiente literario?
Me gustaría llegar a muchas personas obviamente pero no me quita el sueño el deseo de tener más o menos trascendencia. El solo hecho de poder escribir, hacer lo que me gusta ya sea de lleno o en forma paralela a otras actividades, es muy gratificante. Son pocos los afortunados que pueden vivir de lo que les gusta, más aún en el plano artístico. Creo que por eso lo importante es llevarlo a cabo, saciar las ganas del corazón, eso funciona como el mejor motor para la vida. Las cosas buenas que vengan después como consecuencia, bienvenidas sean pero no apunto a ningún objetivo en particular. Prefiero fluir, disfrutar esto de crear y que sea lo que tenga que ser.

¿Cómo te llegó la posibilidad de publicar el libro con Halley Ediciones?
A Mariana la conocí hace un par de años en los ciclos de poesía que siempre acostumbra a hacer. Pero lo loco fue que yo admiraba su poesía antes de conocerla, incluso antes de conocer sus actividades editoriales. Entonces fue doblemente hermoso conocerla. Con el tiempo comencé el taller de acompañamiento poético con ella, y todo lo demás fluyó natural. Ella sabía mi deseo de publicar y cuando vió un determinado punto de maduración en mi poesía, ahí me invitó a formar parte de este hermoso equipo editorial que es Halley. Una oportunidad única, que valoro tanto por haber surgido de una profesional tan linda y admirable como Mariana Kruk.

¿Con qué se va a encontrar la persona que lea tu libro? 
En el libro van a encontrar básicamente poemas de una historia intensa de amor que no fue, y mis constantes intentos de transformar el dolor en luz. Pero está bueno saber que además el libro es la autora en su máxima expresión. Una mujer que se inició en la poesía prácticamente al mismo tiempo en que pudo romper su cascarón, después de muchos años de estar guardada sin conocer realmente la verdadera identidad de su corazón y que a través del amor, de la música y de la poesía pudo llegar a su destino.

¿Tenés pensado escribir otro género literario?
Me encantaría escribir cuentos o cualquier otro tipo de ficción. Hay algunas ideas sueltas flotando en mi cabeza pero aún están verdes. Veremos más adelante si maduran.

¿En qué nuevo proyecto estás trabajando?
Soy muy inquieta, siempre estoy buscando cosas que sirvan de nutrientes para crear. La poesía está presente todos los días en mi vida. Ahora se publica NG pero a la vez se sigue escribiendo, por eso pienso que esto recién empieza, va a haber volumen 2, tal vez hasta 3, no sé jaja. Lo importante para mí es fluir y seguir siempre en movimiento.